La ceremonia tuvo lugar en el Congreso de la Unión
Este 1 de octubre de 2024, México vivió un día trascendental al tomar protesta Claudia Sheinbaum Pardo como la primera mujer presidenta de la República. Este evento marcó no solo un avance significativo en la representación femenina en el Poder Ejecutivo Federal, sino que también se convirtió en un momento histórico al ser el primer sexenio en iniciar oficialmente antes del cambio de gobierno.
La ceremonia tuvo lugar en el Congreso de la Unión, donde Claudia Sheinbaum, militante de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), enfrentó algunos contratiempos debido a la multitud de simpatizantes que se congregaron frente a su hogar. Sin embargo, logró llegar al recinto donde, tras prestar juramento ante los miembros del Poder Legislativo, recibió la banda presidencial de manos de la presidenta de la Mesa Directiva, Ifigenia Martínez.
Durante su juramento, Sheinbaum pronunció el siguiente compromiso: “Protesto guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que de ella emanen, y desempeñar leal y patrióticamente el cargo de presidenta de la República que el pueblo me ha conferido”. Con esto, se formalizó su papel como líder del país y de las Fuerzas Armadas.
En su discurso inaugural, la presidenta hizo un emotivo reconocimiento a Andrés Manuel López Obrador, expresando que “la historia y el pueblo lo han juzgado”, y lo consideró uno de los grandes líderes políticos de la historia moderna. Sheinbaum recordó el proceso de desafuero de López Obrador en 2004 y subrayó que hoy se inicia la “segunda etapa” de la Cuarta Transformación.
Claudia Sheinbaum también destacó la importancia de las mujeres en la historia y su rol en la lucha por la igualdad, afirmando que “hoy sabemos que podemos ser presidentas” y que “llegamos todas”. Su mensaje se centró en la necesidad de visibilizar a las mujeres en la historia y reconocer su contribución al país. Expresó que la llegada de mujeres al liderazgo es un reflejo de los sueños y luchas de generaciones pasadas.
Al finalizar su discurso, Sheinbaum reiteró su compromiso de gobernar para todos y cada uno de los mexicanos, afirmando que “pondremos hasta mi vida al servicio del pueblo y de la patria”. La jornada concluyó con una ceremonia donde recibió el bastón de mando de los pueblos indígenas, consolidando su rol como representante del pueblo mexicano.
Con información de Baja News