Petróleos Mexicanos (Pemex) quemó ilegalmente hidrocarburos valuados en más de 342 millones de dólares en los tres años transcurridos hasta agosto del 2022 en dos de sus nuevos campos más importantes, mostraron documentos internos del regulador petrolero del país.
Los tres documentos, elaborados por la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) y fechados en agosto de 2022, detallan cómo Pemex destruyó recursos en el campo Ixachi con valor de 275 millones de dólares en tres años y de 67 millones de dólares en el campo Quesqui en dos años.
Para calcular el valor, la CNH utilizó precios de contratos no públicos para comercializar dichos hidrocarburos.
Ni Pemex ni la Secretaría de Energía respondieron a solicitudes de comentarios.
A finales del año pasado, Pemex dijo que pondría fin a la quema de gas en Ixachi tras reportes de Reuters sobre violaciones a los planes de desarrollo en los dos campos y multas relacionadas.
Presionada para cumplir los objetivos de producción del presidente Andrés Manuel López Obrador, la petrolera ha sido multada en repetidas ocasiones por el regulador petrolero por incumplir sus propios compromisos para el desarrollo de los yacimientos de Ixachi y Quesqui.
Los planes, para exploración y producción de gas natural y otros hidrocarburos en los estados de Veracruz y Tabasco, fueron aprobados por el regulador, que es responsable de garantizar su cumplimiento.
La quema de gas y condensado -una mezcla de hidrocarburos líquidos similar a un crudo muy ligero- también ha provocado grandes daños ambientales.
Reuters informó el año pasado de que Pemex había quemado gas en exceso en toda la región, pero hasta ahora no se había informado del valor de la destrucción.
México, el octavo país del mundo que más gas quema, recibe cada vez más presiones, incluso de Estados Unidos, para que reduzca esta práctica y las emisiones de metano.
La gestión de las emisiones será cada vez más difícil a medida que los yacimientos envejezcan y la empresa petrolera más endeudada del mundo carezca de fondos suficientes para modernizar sus deficientes infraestructuras.
En Ixachi, la destrucción fue especialmente dramática porque la producción comenzó un año antes. Allí, los documentos muestran que Pemex quemó unos 62,900 millones de pies cúbicos de gas y 310,000 barriles de condensado.
Esto equivale al 31% del total de gas producido en el yacimiento y al 1.3% del total del condensado, según cálculos de Reuters.
Los documentos fueron enviados a la secretaria de Energía, Rocío Nahle, al jefe de cumplimiento regulatorio del brazo de producción y exploración de Pemex, y a funcionarios de alto nivel del regulador y de la Secretaría de Gobernación.
Pemex produjo 201,200 millones de pies cúbicos de gas y 24.3 millones de barriles de condensado en Ixachi. Pero aún así no alcanzó sus objetivos.
Los documentos también muestran que el 77.6% de la inversión en el yacimiento que Pemex había prometido en su plan de desarrollo -por un total de 2,900 millones de dólares- no se realizó.
López Obrador declaró a inicios de su presidencia que Ixachi y Quesqui formaban parte de 17 nuevos campos prioritarios que se esperaba impulsaran drásticamente la producción nacional como parte de un esfuerzo más amplio para hacer al país energéticamente independiente.
Fuente: MSN