
- ORACIÓN DIARIA
Bienaventuradas las que se levantan contentas cada mañana, agradecidas por vivir un nuevo día, caminando hacia Ti, oh Dios.
Bienaventuradas las que se perdonan a sí mismas sus faltas de atención, errores y caídas, abriéndose a Tu divino perdón.
Bienaventuradas las que tienen ojos para ver la simple belleza de Tu creación y alaban sus manifestaciones.
Bienaventuradas las que poseen oídos para escuchar el sonido de la lluvia, las risas, los momentos íntimos de sus propios corazones y Tu voz dentro de todas las voces.
Bienaventuradas las que acogen el amor y el cariño de otros, recordando que en el amor de los demás conocemos el poder de Tu amor por nosotros.
Bienaventuradas las que confían y creen que este viaje humano es un viaje sagrado, y que Tú, oh Dios, estás encontrándonos una y otra vez en nuestro caminar.
Mi vida entera te agradece todas las ocasiones en las que me he percibido Bienaventurada y hoy, con humildad te pido, derrames sobre mí Tu gracia para seguir reafirmando en este andar: que Contigo todo y sin Ti nada.
Amén