Para el director mexicano, “El Fantasma de la Ópera” es la siguiente gran historia que quiere reinterpretar para la pantalla grande
Con el más reciente estreno de “Frankenstein”, Guillermo del Toro continúa promocionando la cinta protagonizada por Oscar Isaac, Mia Goth y Jacob Elordi, sin embargo, ya tiene en mente su próximo proyecto cinematográfico: El Fantasma de la Ópera.
Durante una entrevista con el medio Inverse, Guillermo del Toro fue cuestionado sobre su próximo gran proyecto, hablando del género de terror tras “Frankenstein”.
Habiendo quedado demostrado su talento para adaptar y reinterpretar clásicos del terror a través de una mirada poética, profunda y sobre todo, humana, el cineasta desea llevar a la pantalla grande su versión de la novela de Gaston Leroux.
Recordemos que esta historia ha recibido múltiples adaptaciones, siendo una de las más queridas la versión de 2004, así como sus varias presentaciones en Broadway como obra de teatro musical.
Por supuesto que el mexicano no tardó en responder y reveló que “El fantasma de la ópera”, es la nueva meta que se ha establecido. Pese a ello, destacó que no busca replicar ninguna de las versiones previas, sino algo totalmente distinto y fiel a su visión
Como un adelanto, el director de “El laberinto del fauno” incluso agregó que su versión podría incluir animación stop motion, una técnica con la que ya está familiarizado gracias a Pinocho, cinta que le valió el Premio de la Academia en 2023.
“Es un cuento clásico, pero lo haría de otra manera. Tengo un par de ideas, pero por ahora me estoy adentrando en el género policiaco y en stop motion”, adelantó Del Toro.
¿DE QUÉ SE TRATA “EL FANTASMA DE LA OPERA?
El Fantasma de la Ópera cuenta la trágica historia de Erik, un hombre considerado todo un prodigio en la música, quien vive oculto en las profundidades del Palais Garnier, la Ópera de París, debido a que se apena de su rostro desfigurado.
Toda su vida da un giro cuando se encuentra con la joven corista Christine Daaé, obsesionándose con su belleza y talento. Es así que Erik se convierte en el mentor de Christine.
Sin embargo, se gana su fama como “fantasma” al recurrir a la intimidación y el terror, así como realizar demandas anónimas y propiciando uno que otro accidente fatal, todo con el fin de que le concedan a su amada los papeles protagónicos.
El Fantasma se convierte en el misterioso “Ángel de la Música” de Christine, instruyéndola en secreto para que se convierta en la nueva estrella de la ópera. Para ello, utiliza el terror y la intimidación, incluyendo accidentes fatales y demandas anónimas, para asegurar que la joven que ama reciba los papeles protagónicos y que sus órdenes sean obedecidas por los directores del teatro.
Con información de SanDiego Red