Los asiáticos fueron infinitamente superiores a los europeos
El buen fútbol, lamentablemente no siempre es recompensado, y en un torneo tan corto como lo es una Copa del Mundo, dicha situación termina dejando un muy amargo sabor de boca. Parece que con dicha sensación se iría la selección de Irán, la cual fue dueña y señora del partido ante Gales. El conjunto asiático dominó a placer a Gareth Bale y compañía durante 90 minutos, pero fue hasta el tiempo agregado cuando encontraron premio al esfuerzo. Un 2-0 por demás dramático se terminó sellando en el estadio Ahmed bin Ali, para darle vida a Irán, mientras que Gales, parece que solo espera el final del día para empezar a despedirse de Qatar 2022.
Quien hubiera visto solo los primeros minutos del juego y después solo observara el resultado final, no daría crédito a lo sucedido. Tanto europeos como asiáticos mostraron cierta intensidad al arranque, lo que los ayudó a poder finalizar jugadas, Los primeros en aparecer serían los de la República Islámica con un zapatazo de Sardar Azmoun, pero los integrantes del Reino Unido responderían de forma brava, con el remate en el aire de Kieffer Moore, desviado milagrosamente por el meta iraní Hossein Hosseini.
Esa jugada sería la única de peligro que ofrecerían los europeos, A partir de ese momento los pupilos de Carlos Queiroz intentaron pisar con peligrosidad el terreno galés y se hicieron de un mayor dominio de balón. De hecho, una gran jugada en asociación terminó con un balón filtrado y el remate de Ali Gholizadeh. Para mala suerte de su causa, la jugada fue anulada por fuera de juego.
Tal situación no mermaría el ánimo de los iraníes, quienes mostraron mejores argumentos que Bale y compañía, apareciendo constantemente en el área, Sería Azmoun quien buscaría en par de ocasiones abrir el marcador para los suyos, aunque sin éxito.
Un intento de manejar el resultado, buscar el punto, manejar la estadística apoyados por el punto sumado ante Estados Unidos, ¿arrogancia?… Muchos factores pudieron influenciar para que Rob Page no intentara un extra al ataque. Le dejó la iniciativa a Irán, que traían la intención de curar heridas por lo pasado con Inglaterra hace unos días. Idea y buen fútbol tenían, pero a veces hasta la suerte juega ¡y de qué manera!
Apenas seis minutos después de arrancado el complemento una carambola de remates salvaron la meta de Wayne Hennessey, primero con el disparo de Azmoun, estrellándose en el poste izquierdo, y después el contrarremate de Majid Hosseini, impactandose en el poste derecho. Saeed Ezatolahi, por su parte, encumbraba como héroe al meta galés con su disparo. Al arquero del Nottingham Forest le crecieron uñas al 72′ para desviar el remate.
A pesar de la cascada de cambios que se vio obligado Queiroz a hacer debido a la fatiga de sus muchachos, Irán no dejó de atacar y de presionar al rival, al grado que el ya encumbrado héroe Hennessey volvió con los mortales y tuvo una pifia mayor. Rechazó un balón metros adelante de su área, y se terminó llevando a Mehdi Taremi. El VAR intervino y pintó la tarjeta amarilla de rojo.
Con un hombre de más y con muy pocos minutos por delante, Irán fue con todo en busca de confirmar su superioridad del campo en el electrónico. Dicha situación terminó pasando hasta el 98′ (con un minuto restante de juego), gracias al disparo de Rouzbeh Cheshmi. Su impacto pasó por las piernas de varios defensores y se terminó incrustando por el poste derecho de la meta, ahora defendida por Danny Ward.
Las victoria estaba por más decretada, sin embargo a nadie le hacen daño más tantos a favor; es por ello que se lanzaron en busca de la certificación, y la consiguió par de minutos después. Un mano a mano de Ramin Rezaeian ante Ward terminó con victoria para el elemento del Sepahan.
Irán, encontró un oasis en el desierto, tras su estrepitosa caída. Ahora, buscará el mejor resultado posible ante un Estados Unidos que bien podría llegar necesitado solamente del triunfo, mientras que Gales espera la alineación de los astros para poder llegar con algo de vida a la última fecha…ante Inglaterra.
Fuente MC
