El Papa Francisco ausente en el viacrucis, pero presente en espíritu: “La economía de Dios no aplasta”

El papa cita a san Francisco de Asís para invocar el don de la conversión del corazón
Aunque la salud aún no le permite participar físicamente en los ritos de Semana Santa, el papa Francisco ha dejado clara su presencia espiritual en el tradicional viacrucis del Coliseo romano. Este Viernes Santo, el pontífice que sigue recuperándose de una prolongada infección respiratoria no asistirá a la ceremonia, pero ha escrito personalmente las meditaciones que se leerán durante las 14 estaciones de la Pasión de Cristo.
Las reflexiones, que estarán a cargo del cardenal Baldassare Reina, vicario de Roma y delegado papal, giran en torno a un mensaje fuerte y vigente: “La economía de Dios no mata, no descarta, no aplasta. Es humilde, fiel a la tierra”. Con estas palabras, Francisco contrapone el modelo divino al sistema actual, que califica como “deshumano” y dominado por algoritmos, cálculos fríos e intereses implacables.
“El mundo que hemos construido valora a los noventa y nueve por encima del uno”, denuncia el pontífice en uno de los pasajes, haciendo alusión a una sociedad que deja atrás a los más frágiles. Las meditaciones también incluyen oraciones por quienes se sienten al borde del camino, por quienes no tienen voz, poder ni recursos, y por una Iglesia unida en la fragilidad del amor humano.
En la estación final, Francisco eleva un deseo global: “Que venga tu paz para todas las naciones. Para el aire, la tierra, el agua. Para los justos y los injustos. Para quien es invisible y carece de voz”.
Además, el papa cita a san Francisco de Asís para invocar el don de la conversión del corazón, un gesto que subraya su permanente llamado a la introspección espiritual y a la transformación social.
El Vaticano no ha confirmado oficialmente en qué celebraciones estará presente el papa durante el resto de la Semana Santa, por lo que sus apariciones podrían ocurrir de forma sorpresiva. Este jueves, sin embargo, Francisco dio continuidad a una tradición muy personal al visitar a setenta reclusos en la cárcel romana de Regina Coeli, ubicada en el barrio de Trastevere.
Aún se desconoce si el pontífice podrá impartir la bendición ‘Urbi et Orbi’ desde el balcón de la basílica de San Pedro este Domingo de Resurrección.
Con información de Baja News