Difícil situación atraviesa el cuerpo de bomberos de Tecate, sumergido en una severa crisis, sin unidades funcionales, sin pipas de agua, sin equipo estructural y sin herramientas básicas como palas, hachas, picos o mangueras, aun así tienen que salir a trabajar cada día.
La yarda municipal resguarda la mayoría de los vehículos de bomberos por fallas mecánicas, actualmente solo cuentan con una bombera en la estación central y otra más en la subestación en la colonia Juárez, en Cerro Azul no tienen unidad, en el Valle tienen una que funciona a medias, lo mismo en El Hongo, ahí tienen una unidad que atiende también a Rumorosa pero a veces sirve y a veces no, generalmente para un solo incendio, se requiere la presencia de dos bomberas.
Para Rosa Isela Mercado, dirigente de los burócratas en esta ciudad, comentó que la dirección de bomberos está en una situación deplorable.
De acuerdo a las condiciones generales de trabajo, cada 5 años el ayuntamiento debe entregarles equipo estructural a los bomberos, sin embargo esto no se ha dado, Rosa Isela Mercado expresó que el bombero de Tecate sigue padeciendo la falta de recurso o la falta de interés de los gobernantes.
Hace poco una bombera no pudo llegar a sofocar un incendio pues se descompuso en el camino, algunas subestaciones rurales han tenido que cerrar por falta de unidades, y por si fuera poco, solamente cuentan con un camión cisterna o pipa para todo el municipio, lejos quedaron los tiempos donde por lo menos recibían equipo donado de los Estados Unidos producto de gestiones.
Para los empresarios, que deben pagar cada año una licencia de bomberos para poder operar sus empresas, esta situación pone en jaque a la seguridad de los tecatenses pues, de llegarse a presentar dos incendios o más simultáneamente, bomberos Tecate no podría hacerles frente, así lo expresó Lorena Fimbres presidente del Consejo de Desarrollo Económico de Tecate.
Bomberos Tecate solo puede trabajar con lo poco que recibe, a expensas de que empresas aporten sus unidades para combatir un incendio y cada año, el peligro se hace más grande.