
Su vida creció con los acordes de la guitarra huasteca que escuchaba de su padre
Su vida creció con los acordes de la guitarra huasteca que escuchaba de su padre, en el calor del trópico y el aroma húmedo y pesado de una tierra saturada de aromas y esencias. Fue una relación corta, pues siendo el menor de siete hermanos, poco convivio con su padre quien murió cuando Demetrio era aún niño pequeño.
La escena a relatar se da en un largo fin semana, con la guitarra del compositor y la animación de sus amigos que le acompañamos en una reunión con motivo de su cumpleaños. Allí le conocí y conviví con él… incluso me compuso un corrido con mi nombre e historia. El escenario de tan grata convivencia fue junto a los prismas basálticos, a unos pasos de la hacienda del conde de Regla, en su querido Hidalgo.
Su complicidad con la guitarra le facilitaba cantarle por igual a las penas que da la vida y a las bendiciones su nuestro pueblo originario y su comunidad, como lo fue para Demetrio la pequeña villa de Calnali, en su bello estado.
La vida lo dotó del don maravilloso de componer y en unos minutos podía armar una tonadilla y ponerle letra. Muchos han sido los cantantes y los grupos que han interpretado sus canciones, caería en falta por mencionar sólo a algunos. Debo decir que una española llamada Karina, fue la artista que le abrió la puerta de los grandes escenarios y el éxito al dar a conocer su composición de “Ahora que estuviste lejos”.
Recuerdo su “cañal” dedicada a su padre que se fue temprano de este mundo. La vida de Demetrio tuvo el sinsabor del amor platónico y la desventura del amor perdido. Él hizo cabeza por varios años de su familia, inculcando en sus pequeños el amor por la guitarra y su compañía para expresarse a dúo con ese sonoro y versátil instrumento musical. Letras como “que te han visto llorar”, son una confesión pública de alguien que en el espejo encuentra consuelo a la ausencia de la pareja que no volvió.
Aquí tengo sus CD’s, uno dedicado e invitó a mis lectores que también se imaginen, en un fin de semana, probar la libertad.
POR ANTONIO MEZA ESTRADA
COLABORADOR
YERBANIS33@GMAIL.COM