Política y Economía

 Presión fiscal y desaceleración económica condicionan al peso mexicano

El aumento en la carga financiera de Pemex y las señales de menor crecimiento mantienen al tipo de cambio con sesgo de cautela entre inversionistas

El peso mexicano comenzó la semana alrededor de 18.03 unidades por dólar, en una jornada marcada por factores locales e internacionales que generan cautela entre los inversionistas. La debilidad de la actividad económica en México, junto con un entorno monetario más flexible, contrasta con señales externas que ofrecen cierto respaldo a los mercados emergentes, aunque sin disipar los riesgos.La economía mexicana habría registrado una contracción mensual de 0,2% en noviembre, de acuerdo con estimaciones oportunas, confirmando una pérdida de dinamismo observada desde meses previos. En términos anuales, el crecimiento se mantiene acotado y las proyecciones para los próximos años continúan ajustándose a la baja.Especialistas del mercado redujeron nuevamente sus expectativas para 2025, con un crecimiento estimado de apenas 0,37% del PIB, mientras que para 2026 algunas previsiones apuntan a 0,8%. Este desempeño coloca a México por debajo del promedio esperado para América Latina, que alcanzaría un crecimiento de 2,4% en 2025, ampliando el rezago regional.

Banxico recorta tasas mientras persisten presiones inflacionarias

En el ámbito monetario, el Banco de México aplicó un nuevo recorte de 25 puntos base, ubicando la tasa de referencia en 7% y acumulando ocho reducciones consecutivas. La decisión responde a la necesidad de estimular la actividad económica en un contexto de bajo crecimiento, aunque mantiene abierto el debate sobre los riesgos inflacionarios a mediano plazo.

En paralelo, el costo de la canasta básica mostró un repunte en noviembre, con un incremento de 3,9% en zonas urbanas, lo que continúa presionando el poder adquisitivo de los hogares y limita el margen de recuperación del consumo interno.

Pemex y presión fiscal añaden riesgos al panorama económico

El frente fiscal y energético también condiciona el desempeño de los mercados. El pago del servicio de la deuda de Pemex aumentó 23,8% entre enero y octubre, mientras que los rescates acumulados desde 2015alcanzan 3,3 billones de pesos, sin una mejora sustancial en la situación financiera de la empresa.Adicionalmente, se anticipa un incremento del impuesto sobre nómina en al menos cuatro estados a partir de 2026, una medida que podría afectar la competitividad regional y elevar los costos para el sector productivo.

Entorno internacional: alivio inflacionario con riesgos de crecimiento

En el plano externo, la inflación en Estados Unidos se moderó de forma inesperada a 2,7% en noviembre, lo que elevó las probabilidades de recortes de tasas por parte de la Reserva Federal en 2026. No obstante, la tasa de desempleo subió a 4,6%, reflejando tensiones en el mercado laboral.En Europa, el Banco Central Europeomantuvo sin cambios su política monetaria, mientras que el Banco de Inglaterra optó por un incremento de tasas. En Japón, se registró la mayor alza de tipos en 30 años, con la inflación estable en 2,9%. China, por su parte, enfrenta señales de estancamiento económico y prepara estímulos fiscales y emisión de bonos especiales para 2026.

Peso mexicano: equilibrio frágil y volatilidad moderada

La apertura en 18.03 pesos por dólarrefleja un equilibrio frágil. Por un lado, la moderación inflacionaria en Estados Unidos favorece los flujos hacia mercados emergentes y brinda soporte a la moneda mexicana. Por otro, la debilidad económica interna, el encarecimiento de la canasta básica y la presión fiscal sobre Pemex y los gobiernos estatales limitan su atractivo relativo.Para la jornada, se anticipa un comportamiento cauteloso del mercado cambiario, con el peso mexicano moviéndose en un rango estimado entre 17,90 y 18,50 por dólar, sujeto a la evolución de los mercados internacionales y a la percepción de los riesgos internos.

Con información de Publimetro